Hay libros que te impulsan a seguir leyéndolos sólo por el hecho de terminarlos cuanto antes, simplemente porque no están los suficientemente desprovistos de interés como para dejarlos a un lado sin saber el final, ni son tan buenos como para desear que su lectura dure eternamente.
Esto es lo que me ha ocurrido a mi con, La Costurera, cuya lectura me ha llevado mas de un mes siendo un libro de lectura bastante fácil y tamaño de bolsillo.
Ambientado en el Brasil de los 30, presenta a dos hermanas huérfanas criadas en un poblado del interior, a quienes la vida lleva por diferentes caminos tanto sentimentales como políticos. Es este último matiz, el político, el que para mi resulta pesado y hace que al libro le sobren unas cuantas páginas.
Esta es una opinión muy personal pues reconozco que el tema político, guerras y movimientos históricos no son mi punto fuerte en la literatura, por eso que esta crítica vaya dedicada más a la gente que se mueve en mis mismos gustos. Seguramente para un lector ávido de literatura con tintes histórico-políticos este libro le resulte ameno e interesante y totalmente recomendable.
La base del libro se centra en la importancia de los lazos familiares y la relación que mantienen Emilia y Luzia (Gramola) dos Santos, pese a la distancia que les impone el destino convirtiéndose esto en uno de los puntos fuertes y que creo es lo que hacen que el libro tenga la intensidad suficiente como para que el lector se obligue a seguir leyendo, aunque como en mi caso sea a base de saltarse algunos párrafos.
El nudo de la historia (no contaré nada para no descubrir el meollo de la cuestión) que separa a las hermanas Dos Santos, hace que Emilia siga su vida en una familia acomodada de la ciudad, con todas las alegrías y tristezas que ello le producirá, y que Luzia tome un camino totalmente distinto, uniéndose a un grupo cuya vida se centra en los campos del interior de Brasil y se guia por la supervivencia y la lucha por la libertad de sus derechos.
Ambas hermanas se ven separadas por dos formas de vida, pensamientos y sociedad totalmente distintos, y sin embargo sus sufrimientos, luchas y búsqueda de la felicidad, para convertirse en las dueñas de su destino son las mismas, convirtiéndose esta premisa en el argumento y mensaje que la autora, Frances de Pontes quiso transmitir.
“La costurera” es un libro que recoge amor, aventuras, historia, misterio, política…. Y seguramente para muchos será un libro en el que zambullirse para saborear todos estos matices. Sin embargo para aquellos que buscamos una historia en la que adentrarse sin mas se puede decir que necesitaríamos quitar alguna de las tramas políticas para poder saborear las verdaderas vivencias de Emilia y Luzia con una mejor sensación.
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